Rafael Pardo Avellaneda
Biografía
Rafael Pardo Avellaneda, es licenciado y doctor en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense, obteniendo el Premio extraordinario de licenciatura y de doctorado (1976 y 1985). Profesor titular en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense (1987-1991). Becario Fulbright-MEC en el MIT (1987 a 1989). Profesor titular de Sociología, UNED (1991-93); Catedrático de Sociología, Universidad Pública de Navarra (1993-1996); Visiting Scholar (1996) and Visiting Professor (1998), Universidad de Stanford; Investigador A1 en el Instituto de Economía, Geografía y Demografía del CSIC (1996-2000); Presidente de la Ponencia de Ciencias Sociales de la Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva (1996-1998); Miembro del Consejo de redacción de la Revista ARBOR (CSIC) durante una década; Miembro del Consejo de Redacción de la RIS durante tres años; investigador principal del estudio de INTEL en Estados Unidos, “American Views and Uses of Technology” (1996); Miembro de la Junta Consultiva de la Universidad Autónoma de Madrid (2009-presente); Miembro del Comité Científico Asesor del CSIC (desde 2010-presente); Miembro del Consejo Editorial del Journal of Science Communication (2010-presente), Socio de Honor de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM, 2022). Director de la Fundación BBVA desde el 2001 hasta el presente.
Sus principales líneas de investigación son: las organizaciones empresariales y su papel en el modelado de las relaciones laborales; dimensiones sociales y organizativas de las tecnologías de la información; la Inteligencia Artificial y sus dimensiones sociales; la innovación; las organizaciones en red; el análisis comparado de la cultura científica y las actitudes ante la ciencia en las sociedades avanzadas; los valores, “worldviews” y actitudes ante la biotecnología, la clonación, las “stem cells”, la biología sintética y el medio ambiente; relaciones bioética empírica y análisis social; metodología y técnicas estadísticas en ciencias sociales. Ha dirigido 29 encuestas (19 internacionales) sobre valores, cultura científica, cultura medioambiental, confianza y asociacionismo, perfiles sociales y valores de los estudiantes universitarios.
Coautor de tres libros internacionales (1997, 2003, 2009) y más de cincuenta artículos y capítulos, la gran mayoría de ellos en revistas y obras internacionales, con alto impacto en la literatura internacional especializada. Coeditor con E. Lamo de Espinosa y J. Tusell del libro Entre dos siglos. Reflexiones sobre la democracia española (1996) y con M. Garcia Ferrando, Ecología, relaciones industriales y empresa (1994). Con Michael Greenacre ha desarrollado las variantes de la técnica de Análisis de Correspondencias, “Simple Subset Correspondence Analysis” y “Multiple Subset Correspondence Analysis”, disponibles en los paquetes estadísticos R y XLSTAT para el análisis de subconjuntos de una distribución de datos.
Laudatio a cargo de
Carmen Iglesias
Directora de la Real Academia de la Historia
Académica de número de la Real Academia de la Lengua
Señor, Majestad, es siempre un honor y una alegría Vuestra presencia, hoy en este acto académico que premia a los mejores en sus áreas de conocimiento. Muchas gracias siempre.
Ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes; Presidente del CIS, autoridades académicas, jurados, premiados, colegas, distinguidos invitados:
Es para mí un placer y un privilegio pronunciar unas breves palabras de laudatio de Rafael Pardo, distinguido con el Premio Nacional de Sociología y Ciencia Política del 2022 por el jurado de académicos nombrado por el CIS.
Permítanme primero un apunte personal. Siempre recuerdo la llegada de Rafael Pardo a un Seminario de metodología e ideas, en la segunda mitad de los años setenta, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología; allí leíamos a clásicos antiguos y modernos un pequeño y heterogéneo grupo (que duró varios años); quizá Rafael era el más joven que se incorporó en el momento que empezábamos gozosos a estudiar al gran clásico de la filosofía, Immanuel Kant. Aquel joven algo tímido y discreto, intervenía con sencillez, sabiduría y brillantez, sin faltarle una pizca de ironía y afabilidad natural. Lo más admirable desde el principio era la precisión y riqueza de lenguaje, una arquitectura conceptual que ha seguido creciendo a lo largo de los años. Una conceptualización de la realidad y su interacción con las ciencias - naturales y sociales - y el conocimiento.
Desde entonces, además de seguir su trayectoria académica y profesional, hemos mantenido un constante diálogo en el que los libros, las ideas, la filosofía, la ciencia en general y en particular las ciencias sociales, así como las cuestiones de la esfera pública, han sido elementos recurrentes. Sin perjuicio de las específicas trayectorias de cada cual, hemos compartido sistemas de coordenadas para analizar cuestiones del presente, dando siempre un rodeo por el universo de las ideas y las teorías.
Rafael Pardo, licenciado y doctor en Ciencias Políticas y Sociología, en ambos casos con premio extraordinario, se formó inicialmente en dicha Facultad de Ciencias Políticas y Sociología, cuando la sociología estaba comenzando entre nosotros y se institucionalizaba en nuestro país. Era una facultad en la que influía también mucho la historia, el derecho, la economía, con grandes maestros y con una historia de resistencia desde mediados de los años sesenta y de alentar la libertad de pensamiento y la apertura al exterior. En los setenta seguían grandes maestros como [Díez del Corral, D. Luis García Valdeavellano, Maravall Casesnoves, ...] [al lado de algunos sociólogos que habían adquirido formación especializada en universidades americanas y francesas]. Eran años en los que el contexto político seguía afectando a lo que ocurría en las aulas y fuera de ellas, en los que el llamado marxismo occidental - francés e italiano, principalmente- influía en los debates y orientaciones. El galardonado, que conocía esa literatura, se interesó también por la obra de Max Weber y especialmente por la filosofía política y la metodología de Karl Popper, a la que dedicaría su tesis doctoral. En esos años, enlazó con una influencia externa, la de la escuela de lógica y filosofía de la ciencia y del lenguaje de Manuel Garrido y su discípulo, Alfonso García Suárez. Son los años de la revista Teorema (todavía emociona ver la estantería de los lomos amarillos de la revista que abrió puertas intelectuales y científicas), en los que los grandes autores anglosajones de tradición analítica ofrecían perspectivas completamente distintas de las de la anquilosada filosofía oficial, y que confluían con cuestiones propias de la ciencia y del conocimiento científico de la sociedad. Rafael Pardo fue pionero también en su interés por la informática, siguiendo los cursos que se ofrecían en el Centro de Cálculo de la Universidad Complutense, frecuentados sobre todo por físicos y matemáticos.
El premiado se incorporó como profesor ayudante al departamento de Estructura Social dirigido por el profesor Salustiano del Campo, adscrito principalmente a la asignatura de Organizaciones Formales y subsidiariamente a la de Estructura Social. Allí se inició en la investigación empírica a través de encuestas, colaborando con Robert Martínez, discípulo de Juan Linz, venido desde Estados Unidos para realizar el primer estudio de la estructura y funciones de las organizaciones empresariales agrupadas en la CEOE. Con el Dr. Martínez publicaría algunos artículos y capítulos dedicados a las organizaciones de representación de intereses, ampliados después al análisis del paradigma corporatista en el marco de un gran estudio internacional dirigido por Schmitter y Streeck y en España por el profesor Pérez Díaz. Esa línea sería ampliada después por Rafael Pardo, en colaboración con el Dr. Fernández Castro, a los sindicatos y el sistema de relaciones industriales.
Sus estancias de varios años en universidades americanas, primeramente en el Instituto de Tecnología de Massachusetts de 1987 a 1989 como Becario Fulbright y en la de Stanford, primero como Visiting Scholar en 1996 y posteriormente como Visiting Professor en 1998, en ambos casos en el marco de los programas etiquetados como Ciencia, Tecnología y Sociedad, son indicativas de sus intereses y especialización: el análisis social e interdisciplinar de la ciencia y la tecnología y en particular de la inteligencia artificial y de las ciencias de la vida. En Estados Unidos diseñó para la mpresa INTEL un estudio sobre la visión y usos de la tecnología por la sociedad americana, con motivo del lanzamiento del procesador Pentium. Fruto de esa etapa son varios cientos de páginas escritas por Rafael Pardo, dedicadas a la inteligencia artificial (entre ellas, más de 100 páginas escritas y publicadas en 1993 en un libro del CIS, editado por Emilio Lamo y J E. Rodríguez Ibañez) y otras en la Revista de Occidente y en Arbor.
Uno de los focos más destacados de su trabajo de investigación y publicaciones ha sido el estudio comparado de la cultura científica y tecnológica de diversas sociedades, con algunos trabajos pioneros altamente citados en la literatura internacional, que forman parte de la literatura canónica del campo. Participó junto a otros cuatro científicos sociales de otros países en el diseño de la primera gran encuesta de la Comisión Europea sobre cultura científica en Europa, publicó un libro y varios papers y capítulos en libros internacionales con figuras de referencia como Jon Miller y Fujio Niwa sobre el perfil comparado de los conocimientos, valores y actitudes ante la ciencia de Europa, Estados Unidos, Japón y Canadá. Ha colaborado y publicado también con destacados investigadores biomédicos, como la profesora Schnieke (firmante del paper de la clonación de la oveja Dolly), siendo coautor de tres libros internacionales sobre cuestiones relativas a las ciencias de la vida, papers y capítulos diversos, el último publicado hace pocos meses en un libro internacional bajo el título “El estatus moral del embrión y sus usos: Bioética y percepciones sociales”, que ilustra muy bien su interés por ocuparse de facetas sociales de desarrollos científicos de frontera y hacerlo en, algunos casos, mediante colaboraciones interdisciplinares.
Su continuo interés por la metodología le ha llevado también a desarrollar con el catedrático de Estadística de la Universidad Pompeu Fabra, Michael Greenacre, una variante de la técnica estadística del Análisis de Correspondencias de uso en numerosas disciplinas, permitiendo su aplicación a subconjuntos de una distribución de datos. Esa variante está disponible en los paquetes estadísticos R y XLSTAT.
Rafael Pardo fue profesor titular en la Universidad Complutense y en la UNED, catedrático de Sociología en la Universidad Pública de Navarra e investigador A1 (equivalente a profesor de investigación) en el Instituto de Economía, Demografía y Geografía del CSIC. Desde hace dos décadas dirige la Fundación BBVA, impulsando un programa de apoyo y reconocimiento de la ciencia en numerosos dominios, esos magníficos premios de Fronteras del Conocimiento (que se han convertido en precedentes de los Premios Nobel) y otros programas como las Becas Leonardo. En su trabajo se ha distinguido por ocuparse centralmente de facetas sociales de la ciencia y la tecnología, por cuestiones emergentes e innovadoras, por hacerlo en el espacio internacional y por atenerse siempre a una combinación de teoría y análisis empírico.
Resumo y termino: Un científico social conocido internacionalmente por sus pares y una persona que reúne inteligencia, coraje y humanidad en máximo grado de excelencia. Siempre se aprende cuando se habla y se conversa con Rafael, o se le lee; siempre sorprende al desvelar los caminos y cruces transversales que son posibilidades de comprensión más profunda del tema que se trate; siempre esa capacidad de conceptuar e interactuar entre los datos sobre la realidad y el análisis y los conceptos. Como decía Albert Camus de uno de sus maestros: “Hay personas que justifican el mundo, que ayudan a vivir”. Rafael Pardo es uno de ellos. Muy enhorabuena.
Muchas gracias, Señor, por estar con nosotros.
Muchas gracias a todos.